Este juego, por desgracia, no lo tuve porque en los tiempos de mi infancia solo hubo dinero para comprar una ps1, en cambio, mi mejor amigo de toda la vida ha tenido varias consolas con el paso de los años, entre ellas el GameCube. Fue entonces cuando obtuvo su copia del juego. Como yo me la pasaba en su casa a cada rato jugando con él, lo vi disfrutando de este título y al final terminé jugándolo yo también. Y así comenzó la adicción, porque me encantó cómo era el sistema de combate con cartas, hasta llegué a un punto que ya los personajes de mi partida superaban los niveles de los de la partida de mi amigo, y eso que todavía no pasábamos el primer disco. xD Lamentablemente, y casi que pego el alarido al cielo ese día, mi amigo me contó que perdió el segundo disco... ¡¿Por qué tuvo que ser tan despistado?! >:c ¡Dios mio, lo quiero volver a jugar! D': ¡Intenté correrlo en el emulador Dolphin y mi computadora apenas me muestra imágenes congeladas! ¿Quién tuviera una laptop gamer? xC

En fin, pongamos a un lado mi pesar y veamos más sobre este título.

Este juego es un JRPG que cuenta la historia de Sagi, un chico de 15 años que se unió a un ejército de Alfard. Su historia comienza cuando dicho ejército planea asesinar al emperador, entonces cuando el chico se prepara con su compañera Guillo y van hacia su residencia, resultó que al emperador ya lo habían asesinado. Después descubren que fueron traicionados y los protagonistas huyen junto con los soldados que quedan, sin embargo, se topan con un monstruo que jamás vieron antes. Al cabo que Guillo, al estar en un estado de máquina asesina, le da el golpe de gracia al enemigo, de repente Sagi experimenta un dolor de cabeza que los envía a un mundo desconocido por un breve tiempo. Desde este punto, se esfuerzan por huir del imperio y descubren secretos turbios en el camino.

Eso es más o menos lo que recuerdo de la historia. Ahora, en cuanto a la jugabilidad, nosotros acompañamos a Sagi teniendo un rol en el juego, ya que actuamos como su Espíritu Guardián, con el cual él interactua pidiendo opiniones o decisiones. Podemos ponerle el nombre que queramos, y tiene tanta relevancia en el juego que hasta tiene su propia historia de fondo.
A continuación, iré a la parte que más me gusta; el sistema de combates. Lo que hace a este título tan distinto a otros JRPG, es que sus batallas son con cartas. El sistema funciona así: para que un personaje actúe, tienes que seleccionar cartas que él pueda usar para las situaciones que amerite. Puedes equiparle cartas de armas o armaduras, las cuales pueden ir seguidas de cartas de ataque, y finalmente rematar el combo con una técnica especial. También hay cartas para curar la vida y estados, y hay otras que recargan la energía para usar las cartas de las técnicas.
A parte de esto, hay una gran cantidad de combos especiales que requieren cierto orden de cartas para ejecutarse, si se consiguen, generarán más daño.

En el mundo de este juego, esas cartas las llaman Magnus, y no solamente existen en batalla, también están en los escenarios. Puedes necesitar cierto tipo de cartas para avanzar la historia, así que no es recomendable desecharlas. Cabe agregar, que en cierto punto te dan una mezcladora de Magnus, con la cual puedes unir dos cartas para hacer una nueva, y para que se cree se necesita realizar tres combates para que termine su proceso. Menciono esto porque mi amigo y yo tardamos un largo, largo rato en percatarnos que debíamos utilizar la mezcladora para avanzar (fue gracias a mi y a mi vicio por el juego que lo descubrimos, por cierto).

Con respecto a la música del juego, debo decirles que es una de mis favoritas, incluso disfruté el tema de combate normal cada vez que me topaba con algún enemigo. La banda sonora tiene de todo, desde instrumentos clásicos hasta las guitarras eléctricas en los temas de batallas, hasta melodías a coro y tonos tranquilos. A continuación les anexaré aquí abajo The Valedictory Elegy, el tema normal del que les hablé:

Para finalizar, cabe agregar que este juego es una precuela de otro que salió antes, llamado Baten Kaitos Eternal Wings and The Lost Ocean. Lo jugaría después de este si tuviera una laptop gamer, pero bueno, se puede soñar...